Reflexión sobre las fechas de vencimiento

Hace unos días me empezó a dar vueltas una imagen en la cabeza, no se porque se me vino a la mente la fecha de vencimiento de los alimentos. Inmediatamente me puse a pensar en cuantas veces tanto los comercianetes como las mismas empresas deben desechar los alimentos porque han alcanzado su fecha de vencimiento sin ser consumidos. Esta situación normal me dejó picando en la cabeza un aspecto bastante perverso de nuestra actual forma de vida, es preferible tirar grandes cantidades de alimento cuando estas alcanzan su fecha de caducidad antes que regalar esos mismos alimentos a alguien apenas unos días antes de que los mismas expiren. Analizando la cantidad de gente que por una razón u otra no posee el dinero suficiente para satisfacer sus necesidades más básicas, en este caso la alimentación, se hace evidente la necesidad de un cambio radical en este aspecto que debemos dar a nuestra forma de vivir. Concretamente propongo hacernos la idea de que hay ciertas cosas que los entes abstractos "dinero" y "mercado" no pueden manejar, o mejor dicho no deberían manejar. Si se deja de pensar a la alimentación básica como un comercio estoy seguro de que se evolucionaría hacia una sociedad un poco más justa y equitativa. Advirtiendo que hablo de alimentación básica refiriendome a los nutrientes que debemos ingerir diariamente para lograr un correcto desarrollo fìsico y mental, no me refiero a alimentos que pueden ser considerados como prescindibles, por dar ejemplos de alimentos prescindibles se pueden nombrar golosinas, bebidas saborizadas, postres, etc... Una vez logrado este cambio propongo ampliar los límites de aquello que no debe ser regido por el dinero a las demás necesidades básicas, empezando por la salud y la educación.
Se que es algo muy difícil de lograr, pero si todos empezamos a imaginarlo y trabajarlo en nuestra cabeza estoy seguro de que es posible que en algún momento esto se pueda hacer realidad. Les dejo un saludo.

Comentarios

  1. Lea, me hiciste acordar cuando iba a la secundaria allá por el año 87 y me enteré en ese entonces con asombro que los productores de verdura o fruta por ejemplo, cuando la cosecha es muy abundante tiran millones de tomates, frutillas etc para que el precio no baje. me parecía increíble en ese entonces y ahora tras haber estudiado economía en la universidad, mi asombro se redujo. Lo cual, ahora que lo pienso mejor, es un gran error porque debería seguir asombrándome que en todo el mundo, la ley de la oferta y la demanda haga desperdiciar tanto alimento junto. Y esto pasa día a día mientras millones mueren de hambre. O sea, vos hablabas de productos que llegaron a su vencimiento, acá es mercadería que recién surge pero que es destruida porque si no habría demasiado oferta y el precio bajaría y eso reduciría beneficios. Es algo que debería ser asombroso que realmente pasa pero como es tan normal a nadie asombra ya. Total, la culpa no es de ninguna persona, sino del "mercado". Y la mano invisible de Adam Smith no se deja agarrar...

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  2. Si es verdad lo de los productores de frutas y verduras, pasa lo mismo con la gente que tenía animales en las islas ahora durante la crecida y los dejó morir porque era más barato o no le convenía que el precio se caiga... De igual manera aquellos que pescan y matan otros peces junto con los que son de valor comercial y luego desechan los que no se venden. La vida está plagada de estos hechos que muchas veces parecen cotidianos, creo que empezar a pensar en que no debería ser así es un comienzo... M gustó tu comentario Raúl.
    Lea

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