Lluvia de Septiembre
Es veintidós de Septiembre, un estrepitoso trueno enmudece el ambiente, el cielo se oscurece de golpe y acto seguido comienza la lluvia... intensa, copiosa y desaforada.
Las cortinas de agua cortan prácticamente el paso de la luz, quedando todo absolutamente bañado y en penumbras.
El agua se inmiscuye en todos los rincones, recorre lenta y meticulosamente todos los intersticios de cada una de las plantas, los arboles, el césped, pisos, paredes, ventanas, chapas,todo... Uno a uno, los resabios del invierno son barridos y ya no queda espacio que no haya sido limpiado con las caricias del agua.
Todos los vestigios del frío invierno fueron borrados y el terreno quedó preparado para recibir nuevamente la primavera, esperando simplemente que salga el Sol para que todo vuelva a florecer.
Las cortinas de agua cortan prácticamente el paso de la luz, quedando todo absolutamente bañado y en penumbras.
El agua se inmiscuye en todos los rincones, recorre lenta y meticulosamente todos los intersticios de cada una de las plantas, los arboles, el césped, pisos, paredes, ventanas, chapas,todo... Uno a uno, los resabios del invierno son barridos y ya no queda espacio que no haya sido limpiado con las caricias del agua.
Todos los vestigios del frío invierno fueron borrados y el terreno quedó preparado para recibir nuevamente la primavera, esperando simplemente que salga el Sol para que todo vuelva a florecer.
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